fbpx

Control por ATP: clave en la seguridad alimentaria y en la higiene hospitalaria

Sin categoría 4 abril, 2025

En la industria alimentaria y en entornos hospitalarios, la limpieza no solo es una cuestión visual, sino un factor determinante para garantizar la seguridad y calidad de los productos y la salud de los pacientes. Sin embargo, a simple vista es imposible saber si una superficie está realmente libre de contaminantes. Es aquí donde el control por ATP se convierte en una herramienta esencial, permitiendo medir de manera rápida y precisa el nivel de higiene en cualquier establecimiento.

La limpieza en la industria alimentaria y hospitales: mucho más que apariencia

En cualquier establecimiento donde se elaboran alimentos o se brinda atención médica, la limpieza no es solo una cuestión estética. Garantizar superficies libres de contaminantes y/o esteriles es fundamental para evitar riesgos sanitarios y cumplir con las normativas de seguridad alimentaria e higiene hospitalaria. Pero, ¿cómo saber si una superficie está realmente limpia? Ahí es donde entra en juego el control por ATP, una herramienta que revoluciona la forma de medir la higiene.

¿Qué es el control por ATP y qué detecta?

El control por ATP (Adenosín Trifosfato) es un método que permite evaluar en segundos la presencia de materia orgánica en superficies, utensilios, material quirúrgico y ortopedia. ATP es una molécula presente en todos los organismos vivos, por lo que su detección indica residuos de alimentos, bacterias o incluso restos de limpieza ineficiente. En hospitales, esto es crucial para detectar la presencia de fluidos corporales, microorganismos patógenos y residuos de desinfectantes.

Este sistema no solo revela la suciedad visible, sino también la contaminación invisible, detectando rastros de microorganismos que podrían comprometer la seguridad de los alimentos y la salud de los pacientes.

¿Qué tan preciso es este método y qué lo diferencia de los demás?

El control por ATP destaca por su velocidad y fiabilidad. A diferencia de los métodos tradicionales, como cultivos microbiológicos que pueden tardar días en arrojar resultados, este sistema proporciona un análisis en cuestión de segundos. Además:

  • Es cuantificable, ofreciendo resultados numéricos que permiten tomar decisiones inmediatas.
  • Se adapta a distintos tipos de superficies y equipos de procesamiento de alimentos, así como a superficies y equipos hospitalarios.
  • Detecta residuos en lugares de difícil acceso que podrían pasar desapercibidos con otros controles.
  • Amplio espectro de contaminantes detectables.

ATP vs. otros controles: ¿qué lo hace indispensable?

Si bien existen otros métodos de control de limpieza, el ATP sobresale por su capacidad de prevención inmediata. No es necesario esperar días para conocer el estado de higiene; en minutos, los responsables pueden actuar y reforzar los procedimientos de limpieza y desinfección, tanto en la industria alimentaria como en hospitales.

Uno de sus competidores más directos es la tecnología de detección de proteína en superficies, la cual emplea un formato similar al de ATP más utilizado, hisopos de muestreo. Algunas diferencias entre los contaminantes que ambos detectan, son:

Hisopos de detección de proteínas

Residuos de alimentos

  • Restos de carne, pescado, lácteos, huevos, etc.
  • Residuos de origen vegetal.
  • Microorganismos: bacterias, hongos y otros microorganismos, a través de sus componentes proteicos.
  • Sangre, fluidos corporales, etc.

Hisopos de bioluminiscencia (detección de ATP)

Materia orgánica viva:

  • Bacterias viables.
  • Hongos viables.
  • Levaduras viables.

Materia orgánica muerta:

  • Restos celulares de microorganismos.
  • Residuos de alimentos (ya que contienen ATP).
  • Cualquier resto orgánico que contenga ATP.

Residuos biológicos en general: Cualquier material que contenga ATP.

Puntos clave de la comparación

Mientras que los hisopos de proteínas se centran en la detección de residuos proteicos específicos, los hisopos de ATP detectan la presencia de ATP, una molécula presente en todas las células vivas, proporcionando una medida más amplia de la contaminación biológica total, incluyendo microorganismos viables y materia orgánica en general.

Los hisopos de proteína detectan la presencia de grandes cantidades de proteína, pero no necesariamente microorganismos vivos.

Los hisopos de ATP son más sensibles a los microorganismos, y pueden detectar pequeños niveles de ATP.

Cuando la limpieza es medible, la seguridad es confiable

El control por ATP es mucho más que una herramienta de medición: es una garantía de calidad, higiene y seguridad alimentaria, así como de higiene y seguridad hospitalaria. En un mundo donde la inocuidad de los alimentos, la prevención de infecciones y la proliferación de patógenos son prioridades, contar con un sistema que permita verificar la limpieza y/o la esterilidad en tiempo real hace la diferencia entre un establecimiento seguro y uno expuesto a riesgos sanitarios.

Si querés elevar los estándares de higiene en tu establecimiento, ya sea de alimentos o de salud, identificando las zonas de riesgo microbiológico, el control por ATP es la solución que te permitirá verificar que la limpieza sea realmente efectiva. ¡No dejes la seguridad alimentaria y la higiene hospitalaria al azar!

Suscribite para recibir ofertas y novedades