Que los alimentos sean inocuos para los consumidores depende de un buen control de los mismos, y una detección temprana de posibles alérgenos alimentarios. Existen métodos que permiten hacer análisis y conocer el resultado en tan solo minutos.
Según la Organización Mundial de Alergia (WAO, por sus siglas en inglés), entre el 30 % y el 40 % de la población mundial sufre algún tipo de alergia. Además, esta misma organización asegura que, en 2050, este número llegará al 50 %. Esto debido, sobre todo, a los efectos del cambio climático, la alimentación inadecuada y deficiente, y la mala gestión de medicamentos.
Más allá de este dato sobresaliente, la Organización Mundial de la Salud afirma que existen varias enfermedades alérgicas. Una de ellas se presenta como una patología muy frecuente, especialmente en niños y adultos mayores. Nos referimos a las alergias alimentarias, es decir, aquellas reacciones o respuestas alteradas que manifiesta el cuerpo ante la ingesta de una sustancia considerada como extraña. Estas sustancias son conocidas en el ámbito de la salud como alérgenos.
Nuestro organismo tiene la capacidad de reconocer dichos agentes extraños y, en caso de ser necesario, ya sea por predisposición o por ser genéticamente susceptible; el sistema inmune reacciona contra ellos. Al hacerlo, puede que se produzca una inflamación en las vías respiratorias o en el aparato digestivo. Del mismo modo, pueden aparecer manchas en la piel, molestias y secreción de los senos paranasales, entre otras reacciones. Lo cierto es que, hay alergias que se presentan de manera moderada, mientras que otras pueden requerir asistencia médica.
Déjanos decirte que estos dos puntos están estrechamente vinculados. Sencillamente, porque la alergia a ciertos alimentos es uno de los motivos de mayor consulta a los profesionales de la salud. Y, por ello mismo, resulta indispensable realizar un control de los alimentos y asegurar que los mismos sean inocuos para la salud de los potenciales clientes.
Quizás, no lo sepas, pero, las alergias y la intolerancia alimentaria son temas que preocupan cada vez más a los consumidores. Tanto es así que, muchos de ellos se detienen a leer con atención el etiquetado de los productos antes de comprarlos. Y lo hacen para asegurarse de que, entre sus ingredientes de elaboración, no estén presentes aquellos alérgenos que pudieran provocar una reacción inmunológica, también conocida como alergia alimentaria.
Un dato no menor es que, la capacidad alergénica de algunos alimentos desaparece mientras estos son cocinados o procesados, puesto que sus proteínas se desnaturalizan. Sin embargo, eso no siempre reduce su capacidad alergénica. Por lo cual, resulta indispensable que la industria de los alimentos realice una técnica eficiente que permita detectar a tiempo, y reducir la alergenicidad de ciertas proteínas presentes en los alimentos.
En Rodin encontrarás kits para la correcta detección de alérgenos en los alimentos que tu empresa o fábrica produce. Asimismo, podrás elegir entre dos tipos de métodos de detección: Flujo Lateral y ELISA. Ambas técnicas arrojan resultados en pocos minutos y logrando una precisión asombrosa.
Podrás encontrar tres tipos de kits de detección de alérgenos con el método ELISA:
En tendrás a disposición, también, cuatro tipos de kits de detección de alérgenos bajo método Flujo Lateral.
Si hay algo que en Rodin sabemos bien, es que el control de los alérgenos en los alimentos es un factor muy importante para el buen desarrollo de la industria. Por ello, tomamos el compromiso de brindar opciones óptimas que posibiliten una gestión efectiva de los alimentos, para que sean, realmente, seguros para su consumo.
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